Limpiando... casas... (Mision de rango D de Tsurugi)

Una vez que me fue asignada mi mision fui al conjunto residencial de la aldea oculta entre las rocas, Mientras me dirigia a ese lugar vi varios puestos de comida -Tengo hambre... pero no tengo dinero, supongo que tendre que venir aqui despues que me paguen por mi mision- dije mirando hacia el frente.

Finalmente llegue al conjunto residencial de la aldea, camine por un camino de tierra y ladrillos con casas a ambos lados, decidi comenzar on la ultima casa.

Al llegar a la primera casa me di cuenta que por algo era la ultima casa, estaba toda desarreglada y fea, -que gente... que no limpian sus casas- dije mientras dejaba una cubeta, una escoba y un trapeador al lado de la puerta para tocar la puerta -Buenos Dias...- dije.

-¿Quien es?- dijo una voz proveniente desde dentro de la casa, parecia ser la voz de un anciano.
-¡Soy yo el gran Tsurugi, y he venido a limpiar su Casa!- dije tomando nuevamente la escoga, el trapeador y la cubeta.

La puerta poco a poco se fue abriendo mientras yo esperaba, esta producia un chirrido, lo que daba a entender que la casa era vieja, eso o la puerta no se abria desde hace mucho tiempo. Me dispuse a entrar pero de repente un anciano coloco un Kunai en mi cuello -¿Pero que demo..?-

-¿Quien coño eres?- pregunto el anciano.
-¿Quien coño soy? ¿quien coño es usted y porque me apunta con un Kunai?- grite quitandome el kunai del cuello.
-¿Que has venido a hacer aqui?- pregunto de nuevo el anciano retrocediendo un poco.

No entendia muy bien la situacion, la extrana actitud del anciano hacia mi me dejo algo confundido -oiga señor solo he venido a cumplir mi mision, debo limpiar estas casas, asi que no interrumpa mi trabajo- dije con un tono fuerte de voz.

-Disculpa mi actitud chico- dijo el anciano tras dar un gran suspiro -pero es que ultimamente han venido ladrones y han asaltado mi casa, lo hacen muy seguido pero como soy un anciano poco puedo hacer frente a ellos.- dijo con una mirada de resignacion para luego sentarse sobre una vieja mecedora que estaba en un rincon de la sala...

-Okey...- dije entrando en la casa...

El anciano observaba atentamente todo lo que hacia, aunque tras unos minutos de estar en esa casa lo unico que hacia era limpiar... nada mas, el señor se acerco a mi por curiosidad -¿por que trabajas limpiando casas?- preguntó.

-Pues esa es la mision que me han dado- dije mientras barria.
-pero eres un shinobi, tu protector te lo indica ¿como es que un shinobi anda por ahi barriendo casas de ancianos como yo?-
-No es que un shinobi ande barriendo casas, sino que a un shinobi se le a asignado esa mision, y si no es capaz de cumplir una mision tan simple como esta o no tengo la determinacion para hacerlo ¿podria ser responsable del cumplimiento de una mision mas dificil?- dije culminando mi labor en esa casa.

Un poco sorprendido, el anciano refunfuño ante mi respuesta, al parecer la idea de que un shinobi tuviese la tarea de limpiar casas no le gustaba mucho.

-¿Sabes? en mis tiempos un shinobi desde que era gennin hasta que se retiraba hacia tareas de shinobis, como defender la aldea y combatir a otros criminales, no tareas de aldeanos como barrer, en mis tiempos existia algo que se llama orgullo, ¿como es que tu siendo un ninja te rebajas a trabajos como la limpieza?- pregunto antes de que yo saliera de la casa, tal pregunta hizo que me detuviera.

Me voltee hacia el anciano para mirarlo fijamente -Mire... no es que me guste hacer esto, y tampoco usted me facilita mucho el asunto, pero para un shinobi la mejor labor que puede ejercer es servir a su aldea, aunque eso signifique limpiar casas, los valores que un shinobi debe tener son la determinacion, valor, sentido de pertenencia, amor por su aldea y respeto, demas cosas como el orgullo... es simple necedad- dije dando media vuelta para salir de esa casa.

Una vez que estuve quera de la casa camine hacia la siguiente -Pero que gente con la que se encuentra uno en la aldea...- dije tocando la puerta de la siguiente casa

Al igual que en la casa anterior limpie la siguiente, y la siguiente, y la siguiente, luego llegue a una casa con un jardin al frente, una señora estaba ahi -Buenos dias señora he venido a limpiar su casa-

-Oh... un jovencito, es raro ver que un jovencito como tu se este ofreciendo para limpiar casas ju ju ju- dijo la señora tapando su boca con la mano mientras se escuchaba una sonrisa.

-Si bueno... no lo hago de gratis, me pagan por hacerlo, ¿quiere que le limpie su casa?- pregunte
-No tengo mi casa sucia.... pero el jardin no lo he arreglado asi que... mmm podrias podar algunos de los arbustos del jardin-

Entre a la casa de la señora, -¿con que se supone que debo podar esos arbustos de los que usted habla he?- pregunte mirandola.

-ahi estan unas tijeras y otras herramientas de jardineria, si puedes tambien riega un poco las flores, te lo agradeceria- dijo muy amablemente la señora señalando una caja en donde estaban dichas herramientas

Sin perder el tiempo camine hacia la caja y tome las tijeras, comence a podar algunos arbustos, claro con la guia de mi supervisora para no cagarla....

Despues de un rato termine de podar los arbustos, no quedaron bien, pero mal tampoco, quedaron en un nivel... promedio jeje.

Una por una regue todas las flores con agua hasta haber terminado, finalmente me dispuse a salir una vez dejada todas las cosas en su lugar, tome mi cubeta llena ya de basura, el trapeador y la escoba y abri la puerta de la cerca que rodeaba a la casa -oye espera- dijo una voz detras de mi.

-Chico espera, hice unos panesillos ven sirvete- dijo amablemente la señora, a lo cual yo accedi, tenia ambre je je je
Sin mas aca y sin mas alla lo tome y los comi, solo uno lo tome por pena pero la señora me ofrecio mas y yo amablemente tome otro... y otro... otro... x]

Finalmente termine de comer panesillos en casa de la señora, muy amablemente me dio un vaso de agua, di las gracias por todo, termine mi trabajo en esa casa y continue en la siguiente. Mientras me dirigia a la siguiente casa noté que unos hombres estaban trabajando en un pequeño local de comida, algo inusual en una zona residencial. Los dos hombres sostenian el letrero del local, uno de un laso y el otro del otro lado.-Esos dos necesitan ayuda para fijar ese letrero...- dije dirigiendome hacia donde estaban los dos sujetos.

-¡Oigan! ¿Necesitan ayuda?- pregunte mirando a los hombre que estaba sobre sus escaleras.

Al verme los dos hombres se miraron entre si y luego uno de ellos volteo a mirarme -¡No necesitamos tu ayuda largo de aqui!- grito el hombre, en fu voz se escuchaba que hacia un gran esfuerzo.

-Bien... Ahi se ven- dije dando media vuelta para continuar mi camino, pero uno de ellos dijo "Alto" y me detuve.
-¡Ven! ¡Ayudanos!- dijo el otro sujeto -Mi hermano es un orgulloso, no le prestes atencion, por favor ayudanos, necesitamos que alguien sostenga el aviso de un lado mientras yo fijo el cartel con clavos- dijo mientras bajaba de la escalera, lo mismo hizo su hermano.

Nuevamente el cartel volvio a subirse a la altura que debía estar al frente del local, solo que esta vez, era yo el que sostenia un extremo del cartel mientras estaba montado en la escaleta. Uno de los hermanos trajo el martillo y comenzo a fijarlo con clavos mientras sostenia otros clavos con su boca, Soltamos el cartel y finalmente quedo fijo sobre la parte superior del local, ambos bajamos de la escalera.

-¡Gracias por tu ayuda muchacho! ¿como te llamas?- pregunto uno de los hermanos.
-Mi nombre es el gran Tsurugi un gusto- dije estrechando la mano de ambos sujetos.
-El gusto es nuestro Tsurugi, llevate esto contigo, es una cortesia especial de la tienda, te servira para un desayuno gratis, eso es por ayudarnos- dijo el hombre sonriente.

Agradecido por el cupon de desayuno gratis que me dieron los dos sujetos continue hacia la otra casa, solo quedaban pocas casas, en estas casas no habia mucho que limpiar, mi cubeta estaba ya casi llena de basura, mi brazos me dolian y la espalda tambien, no acostumbraba a hacer tanta limpieza.

-Los que trabajan en limpieza todos los dias si deben tener una resistencia notable, es un duro trabajo, esto me sirbe de entrenamiento no debo quejarme- dije cobrando animo para la ultima casa que quedaba en la calle.
-¡Buenos Dias he venido a limpiar su casa!- dije sonriente a una chica que se encontraba en la parte de adelante de la casa.

-¿HU? ¿Limpiar mi casa dices?- pregunto la chica que al verla me sonroje un poco -es linda- dije dentro de mi, no hice ningun sonido, -¿hola? ¿estas vivo?- pregunto la chica acercandose a mi, parecia un mudo, no me salia ninguna palabra. finalmente emiti algunas palabras.

-he si bueno si... yo etto. si he venido a limpar tu casa- dije.
-¿Eres un shinobi que limpa casas?- dijo riendo un poco
-Si... es una mision que me ha encargado el mismisimo Tsuchikage-
-pues vaya mision mas importante ¿como es tu nombre?- pregunto recostandose en el pequeño muro de su casa
-Me llamo Tsurugi- respondi sonriendo
-Mi nombre es evolet, un gusto Tsurugi, el gran limpia casas de Iwagakure, lo siento pero esta casa esta limpia y no creo que tu puedas hacer algo para que quede mas limpia jejeje- dijo la chica sonriendo.
-Bueno si no hay nada que limpiar entonces no tengo que hacer aqui... supongo que vives aqu... en fin, un gusto conocerte Evolet, me marcho, nos vemos- dije dando media vuelta.
-Nos vemos- dijo ella

Finalmente termine de limpiar las casas y me dirigi a la mansion Tsuchikage, en donde daria informe de la mision.

Termine... Mision cumplida